SE REINAGURÓ LA TORRE DEL RELOJ DE LA LEGISLATURA PORTEÑA
Primero fue la puesta en marcha de Ecolegis y ahora la inauguración de las obras de restauración de la Torre del Reloj y la Pérgola de la Legislatura porteña, donde se emplazaron Terrazas Verdes. De esta manera, el Parlamento empezó a cumplir con dos leyes importantes para el cuidado del ambiente que sancionó el Cuerpo.
Es muy importante, y más para la política, que haya una coherencia entre el decir y el hacer. En ese camino transita, al menos en parte, la Legislatura porteña que ha decidido comenzar a implementar medidas para cumplir con algunas de las leyes que ha sancionado, en lo que respecta al cuidado del ambiente.
En ese sentido, a la puesta en marcha del programa Ecolegis para sumar un granito de arena en pos del cumplimiento de la Ley de Basura Cero, se agregó la instalación de Terrazas Verdes.
El vicepresidente primero de la Legislatura porteña, Cristian Ritondo, junto al vicepresidente segundo, Dante Gullo, y el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, y inauguraron las obras de restauración de la Torre del Reloj, la Pérgola y las Terrazas Verdes del Palacio, llevadas a cabo por la Unidad Ejecutora de Obras a cargo de su Director, Alberto Greco.
Declarada Monumento Histórico Nacional en 2011 por el Gobierno de la Nación, la Legislatura porteña goza hoy de la restauración de nueve mil metros cuadrados. Este trabajo se llevó a cabo en tan sólo siete meses, luego de la sanción de la Ley 1.444, a través de la cual se aprobó el Plan de Obras de Restauración y Puesta en Valor del Palacio Legislativo. De esta manera se creó la Unidad Ejecutora de Obras.
“La culminación de esta obra dice lo fructífero que resulta el trabajo en conjunto. La voluntad y la decisión de los legisladores, la responsabilidad del director de la Unidad Ejecutora, hasta el trabajo menudo, constante y eficiente de quienes tuvieron en sus manos la labor manual, permitieron conformar un equipo armónico cuyos resultados están a la vista”, expresó Ritondo.
El diputado dijo sentir privilegio “porque sean ustedes testigos de una acción que culmina con la restauración y puesta en valor de 9000 metros cuadros que componen el Palacio Legislativo de la Ciudad y por poder compartir la obra ya finalizada y dejarla como una acción más de esta gestión”.
Ritondo agradeció a Gullo y al vicepresidente tercero, Jorge Selser (Proyecto Sur), por “haber acompañado el trabajo realizado por esta Legislatura que es nuestro orgullo de haber sido declarada Monumento Histórico Nacional”.
Anunció también que el próximo 10 de octubre se inaugurará “el nuevo edificio para la futura administración con sistema Leed de certificación, relacionados con la eficiencia energética, el uso de energías alternativas, la mejora de la calidad ambiental interior. También antes de fin de año vamos a inaugurar los paneles para recuperar algunas de ahorro de energía”.
Participaron del acto los diputados del PRO Jorge Garayalde, Francisco Quintana, Bruno Screnci, José Luis Acevedo, Carmen Polledo, Lía Rueda, Raquel Herreno, Marta Varela, Karina Spalla, Gabriela Seijo, Diana Martínez Barrios, Martín Ocampo, Oscar Zago, Daniel Presti; del bloque Bases para la Unión, Adriana Montes y Juan Pablo Arenaza; y del bloque Buenos Aires para Todos, María América González.
También estuvieron presentes los candidatos a legisladores porteños por el PRO, Iván Petrella y Agustí Forchieri; el subsecretario de Prevención del Delito y Relación con la Comunidad, Martín Borrelli (al que la gente de ceremonial considera aún un diputado y él, divertido, decide no corregirlo); los auditores Alejandro Fernández y Paula Oliveto Lago (candidata a diputada por UNEN); autoridades de la Reserva Ecológica Costanera Sur; y directores y autoridades de la Legislatura.
Por último, se descubrió una placa que dice: “Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Restauración de la Torre del Reloj, Pérgola y Terrazas Verdes. Año 2013. Presidencia María Eugenia Vidal. Vicepresidencia 1° Cristian Ritondo. Vicepresidencia 2° Dante Gullo. Vicepresidencia 3° Jorge Selser”.
La misma fue descubierta por Ritondo, Gullo y Santili, quien bromeó con “Canca” no sólo por el contraste de su pelo banco con el colorado de él sino también por el Boca-River.
Luego tomaron el ascensor para acceder a la cúpula. Precisamente en la Torre del Reloj fueron restauraron sus fachadas, se colocó nueva iluminación exterior de carácter ornamental y se hizo el reacondicionamiento de la instalación eléctrica al igual que en la Pérgola.
Además, se restauró la cubierta del Recinto de Sesiones así como la cúpula móvil del Hall de Honor; también los muros de los patios del Palacio, y ocho plafones históricos de iluminación de bronce. Por otra parte, se cambió la membrana hidrófuga de las azoteas, se dio nueva pintura y fueron reparados el interior, muros, carpinterías; también se construyeron dos baños.
La Torre del Reloj, de 95 metros de altura, es uno de los signos distintivos del Palacio Legislativo, inaugurada en 1931. Por entonces, una de las construcciones más elevadas de la Ciudad. De forma octogonal, remata en una cúpula de bronce que sostiene un pararrayos. Su reloj es de cuatro cuadrantes que miden 4 metros y medio cada uno. En su interior se encuentra el mecanismo patrón que lo activa. Cada quince minutos pone en funcionamiento sus cinco campanas llamadas “La Santa María”, “La Niña”, “La Pinta”, “La Porteña” y “La Argentina”. Allí se realizó la restauración de fachadas, la colocación de nueva iluminación exterior ornamental y el reacondicionamiento de la instalación eléctrica.
La imponente figura de la Torre del Reloj se aprecia desde la Pérgola, que se encuentra a cielo abierto en el cuarto piso y en la que se destaca un jardín en altura que balconea sobre la Cúpula del Hall de Honor y la cubierta de vidrio, cuyo luminoso remate se vislumbra desde el Recinto de Sesiones. Los trabajos en la Pérgola incluyeron la recuperación de los canteros, la iluminación y la colocación de césped.
Además, fueron restauradas las fachadas de los patios interiores y las cúpulas del Hall de Honor y la del Recinto de Sesiones, los muros de los patios del Palacio, y elementos históricos como los ocho plafones de iluminación de bronce, la sirena del campanario y las ornamentaciones.
Por otro lado, se realizó el cambio de la membrana hidrófuga de azoteas, la pintura y reparación del interior, muros y carpinterías; y la construcción de 2 baños.
Con un impacto absolutamente positivo, se construyeron las Terrazas Verdes, consecuencia de una ley sancionada en diciembre de 2012 por iniciativa del bloue del PRO, cuyo objetivo es contribuir de manera sustentable con el medio ambiente urbano.
Para este lugar de la azotea se instalaron bandejas desmontables con césped -Grama Brasileña- que mejoran la aislación térmica del edificio y generan una superficie absorbente. Se logra así un menor drenaje del agua de lluvia y una mayor purificación del aire a su alrededor.
Contribuyendo a la idea de una Legislatura ecológica, estos sectores logran disminuir los niveles de contaminación, ya que impiden que el sol impacte directamente en la loza del edificio, mejorando así su aislamiento térmico al enfriar el aire. Sin lugar a dudas, esto ayuda a mejorar la calidad de vida y a reducir los costos de calefacción y enfriamiento, permitiendo un mayor ahorro de energía.
La restauración se hizo sobre 9 mil metros cuadrados en los últimos siete meses y estuvo a cargo de la Unidad Ejecutora de Obras dirigida por Alberto Greco.