BOCA NO SE DUERME Y ENTRE LAS FIESTAS YA ACTIVA EL MERCADO DE PASES
El Xeneixe prosiguió a lo largo de 2025 con un proceso de depuración del plantel profesional que se había iniciado a fines del año pasado, época en la que fueron vendidos Aaron Anselmino y Cristian Medina, mientras que Pol Fernández, Nicolás Valentini y Gary Medel concluyeron sus respectivos contratos. A estas bajas, se les sumaron pasada la mitad de año las de Marcelo Saracchi (a préstamo en Escocia), Marcos Rojo y Sergio Romero, que también rescindieron. Y, sobre el cierre, se despidieron Cristian Lema, Frank Fabra e Ignacio Miramón. Pero de cara al año próximo, la lista podría agrandarse.
Lo primero que tendrá que resolver la dirigencia y el cuerpo técnico es la continuidad de Javier García, tercer arquero del plantel detrás de Agustín Marchesín y Leandro Brey, que continuarán en la institución. Muy valorado por sus compañeros en el día a día, el guardameta, que cumplirá 39 años en enero, extendería su vínculo por un año más si el entrenador de turno, que por el momento sigue siendo Claudio Úbeda, levanta el pulgar.
Hay dos laterales derechos dentro del plantel que cuentan con chances de marcharse en este mercado: Luis Advíncula y Lucas Blondel. El peruano disputó apenas 4 de los últimos 18 partidos oficiales de Boca (completó solo uno de ellos), una cifra alarmante para un futbolista que supo ser uno de los más valorados por el público xeneize en su pico de rendimiento, pero que actualmente es mirado de reojo. Habiendo perdido el puesto con Juan Barinaga, desde hace varios mercados se lo vincula con el fútbol peruano y la dirigencia boquense no pondría demasiadas objeciones ante una oferta para venderlo ya que tiene 35 años, su contrato es hasta diciembre de 2026 y es uno de los más altos del plantel.
