AUTOMOTRIZ

El nivel general de actividad económica se contrajo en mayo un 1,8% interanual, mientras que en los primeros cinco meses del año acumula una caída de 1,1%, según mediciones privadas.

Así surge del índice IGA de actividad económica que elabora la consultora Orlando Ferreres y asociados, que en la medición desestacionalizada de mayo respecto a abril pasado, marcó una leve suba de 0,1%.

“Transcurridos los primeros cinco meses, la actividad económica muestra una contracción acumulada del 1,1% anual, en un entorno en donde los diferentes sectores se ven afectados tanto por los nuevos rumbos de la política macroeconómica como por causas inherentes a cada uno de ellos”, explicó Ferreres.

Respecto de esto último, “el ejemplo más destacable es lo que acontece con el sector agropecuario, en donde se descontaba una cosecha menor a las materializadas en la campaña previa, pero que ha visto magnificarse su retroceso en un entorno climático poco propicio”. 

En cuanto a aquellos segmentos cuya dinámica tienen una relación más estrecha con las decisiones de política económica, se observó la merma de la construcción, con una caída acumulada de 8,9% en un entorno de obra pública en retroceso, y del rubro del comercio, que se ve arrastrado por un segmento minorista que está fuertemente condicionado por la caída del salario real y el consumo. 

Para Ferreres, la caída actual de la economía podría moderarse levemente en la segunda mitad del año, con sectores que “se irán recuperando gradualmente y de manera no homogénea”. 

Puntualmente, el agro ofrecerá cierto impulso con la cosecha fina, mientras que la política fiscal será menos contractiva y el consumo podría reaccionar en la medida en que se recomponga el salario real, estimó la consultora.

En el rubro comercio, el sector registró durante mayo una merma de 2,3% interanual, acumulando en lo que va de 2016 una contracción de 1,4% respecto al período enero-mayo de 2015. 

En particular, este descenso reportado en el quinto mes del año es consecuencia del retroceso de 5,6% observado en la rama minorista en un entorno de salario real en caída. Por su parte, la rama mayorista creció 0,6% favorecido por los mayores flujos de bienes importados y exportados.

En cuanto al rubro de servicios públicos de electricidad y agua, el sector se expandió 7,7% anual en mayo, gracias a una mayor oferta de energía eléctrica, impulsada por la generación hidroeléctrica. 

Esta rama de la actividad es una de las más dinámicas del año, acumulando un avance de 2,5% en relación a igual período del año pasado.
En mayo, la actividad industrial reportó una contracción de 3,3% interanual, acumulando una merma de 0,7% en lo que va del 2016. 

En particular, el resultado del quinto mes del año se vio condicionado por la trayectoria de la industria de los alimentos, bebidas y tabacos (-3% anual) y la de minerales no metálicos (-9,3% anual).

Por último, mayo mostró una caída de 9,7% interanual en el rubro construcción, anotando así su quinto período de contracción consecutivo. 

Particularmente, los despachos de cemento, que son un reflejo de lo que acontece en el sector, mostraron una reducción en torno al 11% interanual.

Por último, transcurridos cinco meses del corriente año, la actividad de la construcción se contrae 8,9% respecto al período enero-mayo del año precedente.