COMPACTAN AUTOS ABANDONADOS
El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, participó este lunes por la mañana del inicio de la segunda etapa del proceso de compactación de autos abandonados en la Ciudad, donde lo recaudado por la chatarra es destinado a la Fundación Garrahan.

Guillermo Montenegro supervisó este lunes el proceso de compactación de autos abandonados en su segunda etapa, siendo lo recaudado por la venta de la chatarra destinada a la Fundación Garrahan. De esta manera, el Gobierno porteño continúa con el Programa de Descontaminación y Compactación para vehículos abandonados en la vía pública, a partir de un convenio entre el Ministerio de Justicia y Seguridad porteño y la Fundación Garrahan.

El ministro Montenegro sostuvo que para “fines de 2013 prevén llegar a un total aproximado de 4000 autos compactados” y señaló que “es muy importante la colaboración de los vecinos para alertar sobre vehículos abandonados en la calle, llamando al teléfono 147, la línea gratuita de la Ciudad, para que luego puedan ser retirados y compactados”.  
Asimismo, mencionó que “los autos abandonados, además de ser un posible foco de infección, son un peligro para el tránsito y también generan inseguridad” y añadió que “hay que diferenciar entre los automóviles abandonados que nosotros podemos retirar y los que están a disposición de la Justicia. Es importante que los vehículos judicializados que son una cantidad importante, puedan ser liberados por la propia Justicia dándonos la autorización para retirarlos”.

 

El ministro porteño y las autoridades de la Fundación Garrahan presenciaron el inicio de la segunda etapa del proceso de compactación en el predio de Parque Patricios, ubicado en Amancio Alcorta y Montesquieu. También estuvieron el subsecretario de Seguridad Ciudadana, Horacio García; y el titular de Custodia y Seguridad de Bienes de la Ciudad, Juan Pablo Sassano.


De la iniciativa participan cuatro áreas del Gobierno de la Ciudad: el Ministerio de Justicia y Seguridad; la Subsecretaría de Transporte, a través de la Dirección de Seguridad Vial, y los ministerios de Espacio Público y Desarrollo Social.

 

Desde septiembre del año pasado, momento del inicio de este programa, ya se llevan más de 600 autos compactados, donde lo recaudado por la chatarra es destinado a la Fundación Garrahan. El dinero contribuye a la fundación para el mantenimiento del hospital, la construcción de nuevas habitaciones para la Casa Garrahan, así como también, la compra de nuevo equipamiento y modernización del existente.

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